Solo quiero dormir cerca de ti y saber que no despertaremos jamás, que ya nunca volveremos a esta absurda realidad, sino que soñaremos con algo diferente: un universo en el cual no nos desvaneceremos en cuanto amanezca.
*
No creo que exista combinación de palabras que pueda ilustrar la esbeltez de tu silueta y la sapidez de tu boca, pues te miro y estallan las pasiones en mi interior. Te miro y siento que nada más importa sino solo empaparme con tu bello ser y embriagarme de tu exquisito sabor hasta que mi tristeza se haya disuelto en tu inefable esplendor.
*
Eras ideal, tus talentos eran los más supremos que hubiese visto. Al menos quisiera poder acariciarte un poco más en mis sueños, pues sólo eso me queda ya; tan solo ahí es el único lugar donde, creo, aún eres real.
*
Sin importar cuán tan oscura fue la situación, siempre luché por ser esa imperecedera luz que te hizo arder el corazón. No obstante, hoy sé que lo mejor es alejarme de ti, pues, aunque te amo y te amaré por siempre, me ha quedado claro que tú no eres para mí. Tus deseos son otros y yo ya no puedo complacerlos, pues mi forma humana ha quedado obsoleta y debo partir hacia el más allá a la brevedad.
*
Lo que me enamora de ti va más allá de lo humano: es el universo que habita en tu interior. No es tu cuerpo lo que me tiene enloquecido, sino tu mente. Esa magnífica y mística hermosura que se desprende de cada palabra que emana de tus sibilinos labios y que pareciera adormecer todo mi dolor. Estar contigo es todo lo que anhelo ya, pues tú eres la única cosa buena en mi vida y, sin ti, prefiero no vivir más.
*
Te amé más de lo que alguna vez imaginé, eso es un hecho. Y debes saber que, aunque roce mis labios con otros y aunque mi cuerpo se funda con muchos más, al final de esta tormenta de agonía eterna seguiré esperando solo por los tuyos para purificar mi alma plagada y enferma de humanidad.
***
Amor Delirante