La noche cae ya, tu mística y catártica mirada se filtra por la desgarrada cortina
La brisa que antes fuese tan agradable ahora no es sino muerte, locura y dolor
Tus sibilinos cabellos rojizos impregnan de nostalgia esta lúgubre habitación
La quimera de besarte se apodera de mi mente, haciéndome un vil y triste soñador
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Lo que experimento cuando estoy contigo está más allá de cualquier realidad
Y, aunque sé que tus misteriosos labios no podrían, ni por error, posarse en mí
Me encanta divagar hasta el infinito cómo sería hundirme en tu bello galimatías
Pues eres el único ser que puede hacerme vibrar con tan rimbombante energía
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Me gustas tanto que me encona no poder contener mis absurdos sentimientos
Es casi como si ya estuviera muerto y solo tú me revivieras cuando me miras
Me paralizas por completo, pero eres, al mismo tiempo, una divina obra de arte
Me basta contemplar tu dulce y acendrada mirada para saber que aún estoy vivo
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Y es que, sin que tú estés conmigo, no sé si sería preferible mejor matarme hoy mismo
Sin el delirante lienzo que tu existencia denota, ya no quiero seguir en esta vida ignota
Te miro desde la lejanía, parapetado en mi miseria y sin saber cómo resurgir del olvido
No sé si sea bueno intentar a ti acercarme, pues sé que mi amor sería solo un desvarío
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Era todo tan perfecto, demasiado para ser cierto, pero tu partida me abrió los ojos
Y, con cruel ironía, el destino me mostró aquello que para siempre me desgarraría
En los tiempos de la destrucción onírica acaso te vería, aunque ya sin ser más tú
Me enamoré de ti como un demente y ahora el precio de tal osadía estruja mi otro yo
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Tal vez se trata únicamente del efecto de este elíxir que provoca tales reminiscencias
O es que en mi espíritu quedaron tatuados los últimos versos de tu poesía suicida
Misma que no hacía otra cosa sino reafirmar los signos de mi trágica existencia
La navaja me susurra la salvación sempiterna, pero tu retrato implora por mi sangre
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¿Por qué no se alejan de mi mente esos ojos tan misteriosamente bellos que solo tú posees?
¿Por qué es tu alma, tan pura e inefable, la única que continúa iluminando mi triste corazón?
Realmente tu hermosura no tiene comparación, siempre has sido tú mi eterno e imposible amor
Y ojalá que, al amanecer, aparezcas por última vez para librarme de este absurdo dolor
…
Quimérico Enamoramiento