,

Amor Delirante 52

Y luego, cuando supe que jamás te podría tener, no me quedó otra opción más que entender… Sí, entender que, si no podía estar contigo, tampoco quería ya que la vida estuviera conmigo.

*

Siempre es así, o al menos para mí… Me enamoré de ti tan desquiciadamente que me olvidé por completo de la existencia de todo a mi alrededor. Me sentí tan atraído por tus encantos de manera irremediable que olvidé lo primordial: tú ya eras feliz con alguien más.

*

Mi corazón se aferra a ti, aunque le suplique que no lo haga. No sé qué me hiciste, no sé cómo es que lograste encantarme de este modo tan demente. ¿Qué especie de hechizo siniestro es el que impera ahora en mi mente? Te extraño en todo momento, aunque yo, bien sé, nunca esté ni por accidente en tu pensamiento.

*

Pensarás que estoy loco si te digo que por un solo beso tuyo yo… Yo podría hasta quitarme la vida y arrojarme directo a los peores infiernos. Y es que ya no quiero irme al cielo, pues, luego del paraíso que simboliza tu boca, el cielo ya me parecería tan poco, tan nada.

*

Ese fue mi error, ¡vaya cosas! Caí rendido a tus pies, pero sin siquiera poder rozarlos un poco, puesto que alguien más ya te había elevado hasta las nubes, hasta un lugar divino de donde nada ni nadie te podría ya alguna vez bajar. Y no importaba cuánto ascendiera, jamás mi tonta humanidad me permitía volver a contemplar tu inmarcesible y poética silueta.

***

Amor Delirante


About Arik Eindrok
Previous

Pensamientos RT34

Pensamientos EHD41

Next