,

Desasosiego Existencial 50

Antes solía vivir, o sobrevivir, si se prefiere la expresión; ahora ya no, ahora ya solo espero una cosa: la muerte. Y espero, sobre todo, que tras su bello velo no se parapete ninguna otra ridícula imposición ni experiencia. Espero que al morir mi consciencia se diluya en el olvido y que cada una de las cosas que aquí viví sean eliminadas por la eternidad; en especial aquellas que tienen que ver con el amor y el perdón.

*

Lo que yo necesitaba no era ningún tratamiento, medicinas, gurúes, médicos, psicólogos, libros, teorías, drogas, viajes, amores ni ninguna de esas tonterías tan humanas… No, lo que yo necesitaba era la cura definitiva a todos los malestares del ser: el suicidio y el imperturbable silencio que con él se cierne sobre todo cuento el ser pueda llegar a experimentar en su absurda cotidianidad.

*

A veces, es bueno salir a las calles y mirar a las personas, pues al hacerlo podemos encontrar una especie de refugio a nuestra miseria al saber que ellos, en mayor o menor medida, también son miserables; ya que, aunque no lo sepan, son solo víctimas de esta ridícula cárcel existencial y su sufrimiento se compagina con el nuestro hasta cierto punto. ¿Debemos compadecerlos? No, para nada. ¿Debemos aborrecerlos? Probablemente un poco, pero no más que a nosotros mismos.

*

No quedaba ninguna botella por vaciar, ningún cigarrillo por fumar ni mucho menos razón alguna para vivir… Aun así, parecía que la batalla contra mí mismo estaba perdida: me era imposible quitarme la vida. Y esto, ciertamente, era la causa primordial de toda mi tristeza.

*

Lo único realmente nuevo para mí que valdría la pena descubrir es la muerte, cualquier otra cosa en la vida ya no es digna de ser descubierta y ni siquiera me interesa en lo más mínimo.

*

No me cabe ya ninguna duda de que esta existencia es tan solo un perfecto engranaje de miseria, sufrimiento y aburrimiento diseñado o surgido para ocasionar los más elevados y desbordantes estados de locura, agonía y desesperación. Y quien quiera que haya diseñado todo esto no puede ser sino un perfecto diseñador de la perversión: un dios de la perversión.

***

Desasosiego Existencial


About Arik Eindrok

Deja un comentario

Previous

Catarsis de Destrucción 53

La Agonía de Ser 44

Next