La primera vez que te vi no comprendí por qué sentí que moría
¿Por qué tal zozobra se filtró en mi alma y apabulló la ironía?
Supuse entonces cierta influencia sumamente rara y siniestra
No quería aceptar lo evidente, lo que consumiría mi mente por siempre
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Un par de lienzos dorados me comunicaron el significado de la algarabía
Los disfraces no me eran ya útiles, pues bajo tu mirada enloquecía
Había un halo de tal intensidad que mirarte era todo lo que quería
En toda mi patética existencia jamás experimenté algo tan majestuoso
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Incluso yo mismo me he recriminado por no poder contener la atracción
¡Qué increíble y paradójico melifluo, qué bestial encarnación de la sublimidad!
¡Cómo desgarra mi garganta la sensación de querer gritar tu nombre!
De salir por la noche y embriagarme cada vez que me desarma tu sonrisa
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Bastante inexperto y demasiado precipitado se torna el movimiento principal
¿Cómo hacer para refrenar las extrañas emanaciones en mi interior?
Ni siquiera puedo ya reconocerme, no sé en qué momento todo se volteó
Solo sé que mi mundo se reconstruyó desde que te conocí y contigo aluciné
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No consigo tranquilizar el remolino de sentimientos y la marea de emociones
Hasta he pensado en matarme para aplacar la implacable manera de extrañarte
He cavilado tanto que mi cabeza ya no funciona correctamente, todo por ti
Hasta quisiera no haberte conocido, pues has alterado por completo mi percepción
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Todo en ti me parece supremo, no tengo espacio para tus defectos
Ni me importa si los tienes, porque precisamente así me embriagas
Tal como eres quiero yo empaparme de la cristalina magia de tus besos
No hay para este pobre demonio fantasía mejor que poseer tu espíritu
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Y yo que tanto deseaba suicidarme, terminé encontrando en ti un motivo
En tu perfecto rostro, tan sibilino y místico, puedo dilucidar mi destino
No me importan ya la poesía ni el arte, porque tú has robado mi atención
Pareciera un milagro haberte conocido, pues gracias a tus ojos es que sigo vivo
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Me siento bien con tu solemne y fulgurante silueta impregnando mi cabeza
Me siento encantado cuando puedo mirarte e inflamar mis entelequias
Con tu augusta constitución deslumbras mis más excitantes delirios
Imagino que hacer el amor contigo debe ser lo más espiritual del universo
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Apareciste en el momento menos esperado, pero cuando más te necesitaba
Nunca había existido un ser que tuviera tal injerencia en mi trastorno
Nunca hubo una persona ante la cual tuviera que ocultar mi verdadero dolor
Por robarte un beso, aunque fuese el más ínfimo, sería capaz incluso del suicidio
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Para mi eterno e imposible amor…
Libro: Triste Insania de Amor y Muerte