Pureza

Ahora pensaba en ti y en lo que verdaderamente sería tu inmarcesible alma. Me parecía que tú poseías una, pues esa eterna pureza y ese inefable talento no podrían ser albergados solamente por tu cuerpo … Leer más

Capítulo XXIX (EEM)

Tras lo ocurrido con Lary, pasé una semana sin tener sexo. Pero rápidamente me dio igual, como todo, y luego de que la policía hiciese menos frecuente el seguimiento de rutina, continué con mi vida … Leer más

Capítulo XXVIII (EEM)

Así fue como salí con Lary. Noté que le había confesado a la señora Dejon, aquella exprostituta que más tarde, ya entrando en su vejez, se había hecho al cristianismo y se creía una santa, … Leer más

Capítulo XXVII (EEM)

Mientras yo proseguía con mi estado inmutable y casi suicida en el que la supuesta dualidad con la que estaba marcado me torturaba cada vez con mayor vigor, resultó que al condominio putrefacto donde me … Leer más

Obsesión Homicida 17

No sé cómo caí en la obsesiva idea que me acompañó hasta la noche elegida para completar mi destino. Lo último que recuerdo es haber tomado el cuchillo y haber mirado con ternura sus rostros … Leer más

Capítulo XXIII (EEM)

Me dolía la cabeza como siempre, era aquel maldito dolor que había llegado misteriosamente y que parecía no desaparecer nunca. Eran sensaciones muy extrañas, como si tuviera unas agujas no físicas atravesando mi cerebro, como … Leer más

Capítulo XXII (EEM)

Pero todo eso era verdadero solo en mi mente, en mi mundo intrínseco, como tantas otras cavilaciones que embotaban mi percepción. Akriza me gustaba y no solo para hacerla mía durante la noche, sino para … Leer más

El Extraño Mental XXI

En fin, ¡al carajo con dios! Muchas cosas me hacía pensar Volmta con su extraña sonrisa y su jovialidad tan familiar. Él, aunque no era partidario del sinsentido, comprendía perfectamente el absurdo en que la … Leer más

Envenenamiento

Cuando hacia mí extendías tus brazos para envolverme con ellos, era como si una parte del tiempo pudiera finalmente hacer reposar mi derruido espíritu. Porque cuando sonreías de ese modo no quería que pararas nunca, … Leer más

El Extraño Mental XVIII

Virgil me miraba con cara de espanto, pero, al mismo tiempo, había cierta adoración anómala en sus facciones. Para ella yo era como un dios, incluso más valioso y hermoso que el dios con el … Leer más