El Halo de la Desesperación 10

Nuestros pensamientos difícilmente nos pertenecen, ya no nos son inherentes. Lo poco que podemos intuir acerca del modo en que creemos funcionan las cosas termina por ser, de una u otra forma, un engaño. Juzgamos … Leer más

El Inefable Grito del Suicidio IX

Así fue como salimos, no sin que antes Isis se sonrojara a tal punto que evitó mirarme durante unos minutos. Una vez fuera tuvimos hambre y decidimos ir a comer algo. Como no conocíamos el … Leer más

La magia de tu sonrisa

Acorralado por la magnificencia de tu reverberante palpitación Posaba mi acongojada alma en la ilusión más destructiva Me aferraba a quiméricas ideas donde me encantaba mirarte Pues tu sonrisa es lo único que ahora me … Leer más

El Inefable Grito del Suicidio V

Súbitamente recordé esos momentos en que me sentía aún más asqueroso. La verdad es que se trataba de un secreto, o eso creía. Yo era, ni más ni menos, un adicto a la masturbación. Eso … Leer más

El Inefable Grito del Suicidio IV

Yo escuchaba a Mandreriz atentamente, prestaba especial atención a la forma tan incisiva en que atacaba la supuesta mediocridad del mundo. Me parecía que sus palabras estaban preñadas de una certeza indiscutible, pero que, de … Leer más

El desconocido

Desternillados rostros vagabundean en las calles inherentes y atroces Resoplan los fulgores de extraño y encomiable brillo tétrico, se matan Insufribles laberintos resaltan en la naturaleza anómala y enfermiza Sabía que lo repugnaba, pero lo … Leer más

La Execrable Esencia Humana 20

En realidad, nunca existe un camino distinto. E, incluso lo que se cree estar en contra del sistema y acercar a la espiritualidad, termina por ser parte del mismo delirio. Pero es también común que … Leer más

El sinsentido de vivir

Ecos de desperdicios contaminados hiriendo los razonamientos del desatino Pensados para devolver el néctar del intestino cuando lo solicite el decaimiento Perdido en el caos estúpido de la civilización y su asquerosa putrefacción Más días … Leer más

Corazones Infieles y Sumisos XX

Pero Vivianka, quien había bebido no tan moderadamente como se creía, lo detuvo. Y, aun así, no se podía atribuir su impulso a la embriaguez. Lo tomó del brazo y lo apretujó contra ella, sintiendo … Leer más

Encanto Suicida 20

La fatalidad de existir era lo que no podía evitar por ningún medio; la terrible y absurda guerra que, desde el comienzo, sabía perdida de antemano. Esa era la mayor contradicción: tener que existir sin … Leer más