El Extraño Mental XXXII

“Yo, que tantas veces había deseado fornicar y que me había mantenido, por alguna razón igualmente absurda, virgen hasta ese momento, ahora no era capaz de conseguir una simple erección. Pero ¿por qué? ¡Que el … Leer más

Pureza

Ahora pensaba en ti y en lo que verdaderamente sería tu inmarcesible alma. Me parecía que tú poseías una, pues esa eterna pureza y ese inefable talento no podrían ser albergados solamente por tu cuerpo … Leer más

El Extraño Mental XXX

¿El extraño mental? Aquella combinación de palabras parecía interesante, ¿qué podría significar? Bueno, después de todo, sí que me consideraba un ser extraño, con una mente un tanto más desviada, o tal vez mucho, que … Leer más

El Extraño Mental XXVIII

Así fue como salí con Lary. Noté que le había confesado a la señora Dejon, aquella exprostituta que más tarde, ya entrando en su vejez, se había hecho al cristianismo y se creía una santa, … Leer más

El Extraño Mental XXVI

El sonido de siete violines me recordó la escena que acontecía ante mis ojos, la cual era, por cierto, definitivamente rara y nefanda. La criatura, que era yo en lo profundo y con la cual … Leer más

El Extraño Mental XXV

Me hallaba en un ataúd a punto de ser enterrado, aunque aún estaba vivo. Sabía que estaba vivo en los términos que me habían sido inculcados para comprender tal condición. No obstante, algo se sentía … Leer más

El Extraño Mental XXIII

Me dolía la cabeza como siempre, era aquel maldito dolor que había llegado misteriosamente y que parecía no desaparecer nunca. Eran sensaciones muy extrañas, como si tuviera unas agujas no físicas atravesando mi cerebro, como … Leer más

El Extraño Mental XXII

Pero todo eso era verdadero solo en mi mente, en mi mundo intrínseco, como tantas otras cavilaciones que embotaban mi percepción. Akriza me gustaba y no solo para hacerla mía durante la noche, sino para … Leer más

El Extraño Mental XX

Y bueno, toda esa mierda era pasajera. Yo era indiferente ante lo bueno y lo malo, llevaba la marca de la dualidad. Decidí salir, aunque grande fue mi sorpresa cuando, al bajar las escaleras, me … Leer más

El Extraño Mental XVIII

Virgil me miraba con cara de espanto, pero, al mismo tiempo, había cierta adoración anómala en sus facciones. Para ella yo era como un dios, incluso más valioso y hermoso que el dios con el … Leer más