Obsesión Homicida 44
El espléndido deseo del suicidio era ya lo único que me permitía seguir vivo, pues ser un suicida de esos que no se matan era el espejo en el cual se reflejaba cada noche la … Leer más
No hay razones para existir
El espléndido deseo del suicidio era ya lo único que me permitía seguir vivo, pues ser un suicida de esos que no se matan era el espejo en el cual se reflejaba cada noche la … Leer más
No hay mejor método de control social que una mentira mundial propagada por todos los gobiernos, medios de comunicación e instituciones, entre otros; y que, además, es considerada como una verdad absoluta. Y que mejor … Leer más
Si realmente no querer estar en este horrible mundo y detestar a los infames seres que lo habitan es una enfermedad, entonces creo que ya es momento de degustar la única cura posible cuando se … Leer más
No sé qué sería mejor: dejar que la humanidad prosiga con su miserable y nauseabunda existencia o exterminarla para hacerle un cumplido a la decencia. * El ser puede ser perfectamente definido como aquella vomitiva … Leer más
Existir por obligación y soportar esta horripilante pseudorealidad plagada de alimañas humanas es, quizás, aún más suicida que el mismo acto de suicidarse. * Sube la dosis, aumenta la esquizofrenia… Afuera llueve mientras dentro la … Leer más
Indudablemente, la existencia en general (y más la de la humanidad) ha sido una tragedia de dimensiones estratosféricas. Pero ¿a quién se culpará ahora? ¿Acaso a dios o al diablo? ¿Acaso a seres de otros … Leer más
Buscando un inexistente sentido a mi absurda y deplorable existencia humana fue como encontré la oscura entidad reprimida que sollozaba por un ínfimo momento de libertad dentro de mi acongojada alma, misma que me condujo … Leer más
Es tal vez igualmente espiritual el embriagarse o hundirse en la decadencia que fingir pureza y virtud. En cuyo caso, estas últimas no son sino símbolo de un conjunto de falsas doctrinas y/o ridículas normas … Leer más
Necesité de muy poco tiempo para entender que aquellos blasfemos seres a mi alrededor, esos cuyos máximos placeres no podían ser otros sino el poder, el sexo y el dinero, jamás comprenderían ni un ápice … Leer más