El Color de la Nada 12
Pensaba que era yo un ser demasiado absurdo que no conocía otra forma de contrarrestar el absurdo mismo sino siendo cada vez más absurdo y viviendo de modo cada vez más absurdo. De cual manera, … Leer más
No hay razones para existir
Pensaba que era yo un ser demasiado absurdo que no conocía otra forma de contrarrestar el absurdo mismo sino siendo cada vez más absurdo y viviendo de modo cada vez más absurdo. De cual manera, … Leer más
El último réquiem suena ya y es tristeza infinita lo que anuncia. En este nublado y lluvioso día, hace ya tantas tardes atrás, te marchaste sin dejar huella alguna y dejaste en mí esta herida … Leer más
Dicen que cada persona es un mundo, puede que sí o que no. No sé, pero yo digo que cada mundo que existe debe ser destruido sin distinción alguna. Solo así, mediante un exterminio total … Leer más
¡Qué horrible debe ser para cualquiera seguir existiendo en un mundo como este donde enamorarse es más bien una desventaja! Porque, en efecto, tan tergiversadas están las cosas y las relaciones personales que el hecho … Leer más
Buscando razones por las cuáles seguir respirando es como he llegado a darme cuenta de que tan solo el suicidio me haría bien, pues solo él, con su mística esencia, podría purificarme verdaderamente de todas … Leer más
Solía permanecer en amplios lapsos de soledad, pero ahora ya ni siquiera eso me era tolerable, pues había perdido no solo la capacidad de soportar a los demás, sino también, y, sobre todo, a mí … Leer más
La tristeza nunca se terminará, sino que continuará devorando mi ser y retorciendo mis pensamientos en formas cada vez más ominosas. Lo único que espero pueda frenar esta diabólica condición de psicosis depresiva es la … Leer más
Y, si no es el suicidio, entonces ya no quiero nada, pues ya nada tendría ningún sentido mientras no se trate de mi propia e indispensable destrucción. Sé bien que podría parecer que me he … Leer más
No conocía mejor forma de liberar tensión que no fuera lastimando mi cuerpo una y otra vez hasta el amanecer, ensangrentando las paredes de esta pringosa habitación con mi asquerosa sangre humana y fantaseando con … Leer más