El Color de la Nada 12
Pensaba que era yo un ser demasiado absurdo que no conocía otra forma de contrarrestar el absurdo mismo sino siendo cada vez más absurdo y viviendo de modo cada vez más absurdo. De cual manera, … Leer más
No hay razones para existir
Pensaba que era yo un ser demasiado absurdo que no conocía otra forma de contrarrestar el absurdo mismo sino siendo cada vez más absurdo y viviendo de modo cada vez más absurdo. De cual manera, … Leer más
Más que desesperanzado, me sentía satisfecho cuando confirmaba, una y otra vez, mi hipótesis que casi todas las personas eran jodidamente absurdas y estúpidas. Ya me había acostumbrado a que así fuera, y rara vez, … Leer más
No hay límites en el hartazgo y la frustración que pueden experimentarse en esta cárcel existencial, por eso debemos nosotros poner punto final mediante la sublime esencia del suicidio. Eso es lo único que resta … Leer más
La locura es solo un mecanismo de defensa de nuestra psicótica mente cuando se descubre la avasallante verdad de nuestra sórdida existencia y cuando no podemos entender suicidarse será siempre lo mejor. Entonces resulta imposible … Leer más
Buscando razones por las cuáles seguir respirando es como he llegado a darme cuenta de que tan solo el suicidio me haría bien, pues solo él, con su mística esencia, podría purificarme verdaderamente de todas … Leer más
Era hasta tragicómico observar cómo las personas estaban tan asquerosamente satisfechas de ser tan estúpidas y banales. Era como si eso mismo precisamente las alentara a proseguir con su absurdo parloteo y su nefando andar. … Leer más
La tristeza nunca se terminará, sino que continuará devorando mi ser y retorciendo mis pensamientos en formas cada vez más ominosas. Lo único que espero pueda frenar esta diabólica condición de psicosis depresiva es la … Leer más
Lo esencial era morir, resultaba más que indispensable. Era una necesidad, una obligación, algo sagrado en mi sino. La maldita realidad ya no era tolerable, pues todo era un asco, una estupidez, una vil ignominia. … Leer más
No conocía mejor forma de liberar tensión que no fuera lastimando mi cuerpo una y otra vez hasta el amanecer, ensangrentando las paredes de esta pringosa habitación con mi asquerosa sangre humana y fantaseando con … Leer más